Hoy vemos la Iglesia parroquial de Nuestra Señora de Consolación. La iglesia tiene su origen casi al mismo tiempo en que se fundó la
villa, edificándose en el siglo XV. El templo es de estilo mudéjar con distintas
intervenciones en los siglos XVI, XVII y XVIII, siendo ampliada por el
incremento del número de habitantes. Se cambió el estilo arquitectónico
elevándose las bóvedas, se completó la torre campanario hasta el nivel
actual y se definió la estructura básica del edificio que se conserva en
estos momentos que presenta un estilo neoclasicista.
En su exterior destaca su airosa, robusta y alta torre campanario coronada por chapitel octogonal
recubierto de azulejos, el chapitel fue añadido en el siglo XIX.
El templo tiene dos portadas, la principal, que se abre en la nave de La Epístola, dando a la plaza Virgen de los Remedios. La otra portada se abre en el muro de El Evangelio. Hasta el siglo XIX existió otra puerta a los pies del templo bajo la torre.
El interior del templo tiene tres naves divididas en tramos y capillas laterales adosadas.
El retablo mayor es obra neoclásica fechada en torno al año 1800. En el camarín central vemos a Nuestra Señora de Consolación, interesante imagen mariana del siglo XVI atribuida a Roque Balduque o un discípulo de este, fue traída de la ciudad desaparecida de Facialcázar, al establecerse sus últimos habitantes en El Coronil. A ambos lados de esta, están situados San Sebastián y San Roque, Patrón de El Coronil. En el segundo cuerpo y procedentes del primitivo retablo barroco vemos las imágenes de San Pedro y San Pablo flanqueando a un Cristo Crucificado relacionable con Juan Bautista Vázquez el Viejo, de la segunda mitad del siglo XVI.
Situados a los pies de la nave principal están el órgano realizado en el año 1781 y el
coro instalado en el siglo XIX en el espacio que hasta ese momento había
sido la entrada principal del templo.
En la cabecera de la nave de El Evangelio se encuentra la capilla de Nuestra Señora del Rosario, con retablo barroco del siglo XVIII e imagen de vestir de la misma época. A ambos lados hay dos pequeñas imágenes de talla completa que representan a San José con el Niño y a Santa Ana con la Virgen Niña.
Después vemos el retablo neoclásico del Sagrado Corazón de Jesús.
En la siguiente capilla vemos el retablo de Nuestra Señora de la Soledad, obra barroca de finales del siglo XVII, del siglo XVIII son las imágenes de la Virgen de la Soledad y el Cristo Yacente, articulado para la representación del descendimiento.
En un lateral de esta capilla está situado el retablo de las Ánimas Benditas del Purgatorio, neoclásico del siglo XIX.
Seguimos en la nave de El Evangelio, vemos ahora la capilla de San Francisco de Asís con retablo barroco del siglo XVIII e imagen del santo del siglo XVII.
En un lateral de esta capilla está el retablo de Nuestra Señora del Carmen, obra del siglo XVIII.
La siguiente capilla es la sacramental con retablo neoclásico del siglo XIX en cuyo ático hay una pintura atribuida a Juan de Zamora del siglo XVI. La pequeña talla de la Inmaculada Concepción que preside el retablo es obra del siglo XVIII al igual que sus ornamentos de orfebrería.
A los pies de esta nave se encuentra el baptisterio.
En la cabecera de la nave de La Epístola vemos la capilla de San José con retablo neoclásico con imagen de la misma época.
Después viene el retablo de Nuestra Señora del Dulce Nombre, el retablo está recompuesto con piezas de varios primitivos del siglo XVIII. La imagen mariana de vestir está relacionada con Juan de Astorga.
El siguiente retablo es el de Santa Teresa de Jesús, obras del siglo XIX tanto el retablo como la imagen.
Terminamos con el retablo de Nuestro Padre Jesús Nazareno, el retablo es barroco de principios del siglo XVIII, la imagen es obra anónima de la misma época aunque se cree que pueda ser anterior por su hieratismo.
Junto a este retablo hay una pequeña urna con una imagen de San Antonio de Padua.
¡Espero os haya gustado este reportaje!
