Seguimos con la ruta por pueblos de la provincia de Huelva.
Esta localidad se encuentra en la comarca de El Condado. Está situada a 28 kilómetros
de Huelva y tiene 4118 habitantes.
Niebla ha tenido una gran importancia en Andalucía, con gran peso en su historia a través del establecimiento de distintos pueblos y culturas. Se puede considerar la capital histórico-cultural de esta zona onubense, si bien a lo largo de los últimos siglos perdió gran parte
de su relevancia.
En 1982 fue declarada Conjunto Monumental Histórico-Artístico.
Al otro lado de la plaza de Santa María y dejando atrás una antigua fuente, se levanta ante nuestros ojos la Iglesia parroquial de Santa María de la Granada, el edificio es una superposición de edificios religiosos de distintas épocas,
principalmente, una mezquita árabe y una iglesia gótico- mudéjar. Del
edificio islámico se conservan muchos elementos originales de finales
del siglo X o el siglo XI. A comienzos del siglo XVI, parte de la mezquita cristianizada se derriba, sobre todo en el interior, para erigir en su lugar
tres naves mudéjares, cubiertas de artesonado, y un hermoso presbiterio
gótico de complejas bóvedas ojivales estrelladas.
Aunque menos visble, el legado visigodo
también está presente en la Iglesia, ya que esta llegó a ser sede episcopal de la antigua Elepla. Así lo atestiguan una tabla ornamental visigoda y la silla episcopal de piedra que se
conservan en este recinto. Por último, hay que señalar que la Iglesia tiene columnas romanas, ya que en su época también hubo en el mismo lugar un templo romano.
Volvemos a salir a la plaza de Santa María y en un lateral vemos el
Hospital de Nuestra Señora de los Ángeles, actual
Casa de la Cultura. Edificado en el siglo XIV, aunque sufrió importantes modificaciones en los siglos XVII y XVIII.
Después os enseño el
Castillo de los Guzmanes, el edificio situado en un extremo de la ciudadela andalusí construida durante la taifa de Niebla, tiene planta cuadrangular, dividida en dos grandes patios rodeados de torreones cuadrados. La torre del homenaje
se levanta en la esquina nordeste y tiene planta cuadrada rematada por
almenas defensivas. El material empleado en la construcción mezcla el
aparejo de sillarejo, los sillares de piedra y el tapial.
Aunque el castillo tiene restos romanos, visigodos y andalusíes, la construcción del edificio actual es una reforma posterior a la Reconquista y a la creación del condado de Niebla, siendo el II duque de Medina Sidonia el constructor del castillo actual.
El terremoto de 1755
provocó graves desperfectos tanto en las murallas como en el castillo,
pero principalmente en la torre del homenaje. Durante la Guerra de la Independencia, parte de las murallas del castillo fueron destruidas por las tropas francesas.
Visitamos ahora la
antigua Iglesia de San Martín, construida en la primera mitad del siglo XIII. primero fue la mezquita menor que fue concedida a los judíos por Alfonso X el Sabio como
sinagoga. Después en ella edificaron los cristianos la Iglesia de San
Martín.
En la actualidad se conserva sólo el ábside y la puerta mudejar de los pies, pues el cuerpo de las naves ha desaparecido. El ábside data del siglo XV, de estilo ojival con pequeños ventanales y planta dodecagonal.
Anexa a la Iglesia de San Martín está la
Capilla del Señor de la Columna, pequeña capilla mudéjar presidida por la imagen del Cristo de la Columna, anónimo del siglo XIV o XV y muy venerada por los iliplenses.
A partir de ahora y salpicados por el reportaje veremos la
Muralla de Niebla y las distintas
Puertas de esta.
El
recinto fortificado es el más
completo e importante de los que se conservan en España. Ha sido
destruido y reedificado varias veces, especialmente durante la época
musulmana. Casi toda la obra que se conserva en la actualidad se puede
fechar durante el dominio almorávide, hacia 1330. El último rey de
Niebla, Aben-Mahfot, antes de la venida de las tropas cristianas sobre
Niebla y como medida de precaución, volvió a edificar el recinto por
completo, dejándole las cinco puertas que, actualmente, tiene la
muralla.
Las murallas y torreones cubren una
extensión de 16 hectáreas con una altura máxima de 16 metros. Su
perímetro aproximado es de 2 kilómetros de longitud, en el que se reparten 48
torres cuadradas, 5 rectangulares, que albergan las diferentes puertas:
de Sevilla, del Socorro, del Agua, del Buey y del Embarcadero. Por
último, cuenta con dos torres octogonales en el frente de levante.
En primer lugar os muestro la Puerta del Socorro, recibe el nombre de una pintura al
fresco que se encuentra en una de las paredes del interior del torreón que
alberga dicha puerta, en el que se representa la imagen de la Virgen del
Socorro del siglo XVI.
Es la puerta por donde hizo su entrada Alfonso X el Sabio al tomar la fortaleza. Se conservan aún vestigios romanos.
Entre la muralla y el río Tinto está situado el Apeadero de Tren de Niebla.
Ahora vemos la Puerta del Buey, de estilo almohade mudéjar, es una de las puertas más hermosas del recinto, por su ubicación frente al río.
También es uno de los puntos más sugerentes por la leyenda que circula
en torno a esta y de la que tomó su nombre. Se cuenta que durante el
sitio de Niebla por las tropas de Alfonso X el Sabio, Aben-Mafot, último
Rey de Niebla, tras varios meses de asedio y escaseando los víveres
dentro de la ciudad, hizo salir un buey cebado por dicha puerta para
hacer pensar a las tropas que aún contaban con una gran provisión de
alimentos. Sin embargo, esta estratagema no dió resultado y los
cristianos reconquistaron finalmente la ciudad.
Damos un pequeño paseo por las calles del municipio.
En tercer lugar os enseño la Puerta del Agua, de estilo almohade mudéjar, su nombre viene dado a que por dicha puerta era por donde se canalizaba el agua para abastecer la ciudad.
Vemos después la plaza de la Feria y en ella el monumento al último Rey Taifa de Niebla.
Cerca de allí y en cuarto lugar vemos la Puerta de Sevilla, conserva aún cierto sabor romano pese a que la mayor parte de la construcción es árabe. Se denomina de Sevilla porque se abre al camino que conduce a dicha ciudad.
Os enseño después la Torre del Oro, situada en el vértice oriental del recinto amurallado y el Puente Romano situado a la entrada del municipio sobre el río Tinto.
En quinto lugar vemos la puerta que nos queda, la Puerta del Agujero, no es una auténtica puerta de la muralla como las mencionadas
anteriormente. Dicho arco debió formar parte del antiguo arce o
ciudadela romana como su estilo evidencia.
Por último y a extramuros se encuentra la Ermita de San Walabonso y Santa María, Patronos de Niebla.
También aunque no dispongo de fotografías, a seis kilómetros de la localidad se encuentra la Ermita de Nuestra Señora del Pino, Patrona de Niebla.
¡Espero os haya gustado este reportaje!